La semana pasada se grabó el capítulo inicial de "Herederos de una venganza" en una quinta ubicada en Bella Vista. El rodaje fue durante toda una noche y hasta la salida del sol.

Se casó, chicas. Luciano Castro dio el sí. Pero en la ficción, eh. Su momento rosado duró sólo apenas un capítulo: el primero de Herederos de una venganza, la nueva ficción que Pol-ka prepara para el horario central de El Trece y que comenzó a grabarse el 23 de noviembre. La imagen del final de este episodio inaugural es la que se ve en la foto. Para que entendamos: la historia se desarrolla en Vidisterra, un pequeño pueblo dedicado al cultivo de la vid y la producción de vino. Allí hay sólo una bodega que posee todos los viñedos y todas las fuentes de trabajo. El personaje de Castro es Antonio, un ingeniero agrónomo, que llegará a ése recóndito lugar con el fin de contraer matrimonio con Angie, su novia y hermana de su querido amigo Rafael (Federico Amador). Pueblo chico, infierno grande, aunque parece un lugar tranquilo, en Vidisterra hay una logia liderada por el Gran Maestre (Alfredo Alcón).

El casamiento de Antonio (Castro) terminará en tragedia. Una tragedia relacionada con esa mismísima logia. Luego del casamiento, Angie Ferrero (Gabriela Groppa) desaparece y su flamante marido desencadena una búsqueda que finaliza al encontrarla muerta. El rodaje de estas escenas se hizo la semana pasada en una clínica privada de Bella Vista. Se extendió durante toda la noche y llegó hasta el amanecer. Entre técnicos y equipo de producción, trabajaron 40 personas. Así las cosas, con el fin de la vida de Angie, comienza una historia con un elenco a todo trapo, entre los que se encuentran Romina Gaetani, Marcela Kloosterboer, Leonor Benedetto, Rodolfo Ranni, Antonio Grimau, Daniel Kuzniecka, Marco Antonio Caponi y Betiana Blum.